Cuando comienza el otoño y empezamos a ver más cerca el invierno, tenemos que preparar nuestro hogar para la llegada de las bajas temperaturas y, de esta forma, tener nuestra vivienda adaptada para pasar largas tardes invernales de forma cómoda y apacible. Aquí es donde entran en juego los distintos tipos de calefacción para casas de los que vamos a hablarte.
A la hora de escoger entre todos los tipos de calefacción para el hogar que existen, tendrás que tener en cuenta sus características para elegir el que mejor se adapte a tus necesidades. Pueden influir factores como:
- · Tamaño y orientación de la casa.
- · Uso de la vivienda, es decir, si es temporal o permanente.
- · Aislamiento térmico de la construcción, para retener el calor.
- · Temperatura de la zona, ya que el factor climatológico puede afectar.
- · Si se requiere instalación y mantenimiento.
- · Precio de la energía que se vaya a emplear. Por ejemplo, electricidad, gas natural u otro combustible.
- · Factores medioambientales. Si empleas energías renovables, como la biomasa, puedes recibir ayudas o bonificaciones.
Clasificación de los tipos de calefacción para casas más comunes
Actualmente, en el mercado puedes encontrar una amplia variedad en lo que a tipos de calefacción para casas se refiere, y en Barral disponemos de algunas de ellas. A continuación, te ofrecemos una clasificación general para que tomes la mejor decisión para tu hogar:
Calefacción para casas con electricidad
Podemos encontrar este tipo de calefacción para casas de forma habitual en las viviendas de nuestro país. A partir de la utilización de este tipo, podemos encontrar:
- · Calderas individuales
- · Radiadores eléctricos fijos o móviles
- · Acumuladores eléctricos
- · Hilo radiante
Entre sus ventajas encontramos que es un sistema de instalación sencilla y segura, sin correr riesgos de pérdidas de gas o de falta de suministro y que se puede transportar con facilidad si contamos, por ejemplo, con un radiador eléctrico, pero por el contrario pueden suponer elevar el gasto de nuestras facturas, ya que no es la alternativa más económica que podemos encontrar, porque calientan muy pronto pero consumen mucha luz.
Calefacción de gas en tu hogar
Representa gran parte de la calefacción en los hogares españoles por ser uno de los sistemas más cómodos, limpios y seguros, además de respetuosos con el medio ambiente. Dentro de esta clasificación podríamos encontrar diversas opciones:
- · Bombonas de gas butano (cada vez más en desuso).
- · Suministro de gas natural, muy demandado y seguro.
- · Calefacción de gasoil. Sistema económico y de mantenimiento sencillo, capaz de calentar una estancia en poco tiempo, pero necesita un espacio para colocar la caldera (depósito de gasoil).
También resulta más económico, en comparación por ejemplo con el precio de la electricidad. Aunque esto dependerá mucho de la zona y sus temperaturas, ya que puede dispararse el coste si los inviernos son muy largos y fríos.
Para su funcionamiento bastará con instalar calderas y radiadores de agua por la casa.
Sistemas de calefacción para casas radiante
Uno de los tipos de calefacción para casas más de moda últimamente, pero también uno de los más caros, ya que requiere de una reforma para su instalación y posterior mantenimiento. Es un método eficiente que implica grandes ahorros energéticos y además respetan el medio ambiente.
Bomba de calor
Funciona mediante la electricidad, y consiste en un aparato de aire acondicionado capaz de emitir calor.
Es adecuado para los casos en los que queremos calentar un espacio pequeño rápidamente, consume poca energía y no desprende humos ni gases. Sin embargo, hay que tener en cuenta que la distribución del calor no es homogénea, ya que únicamente calientan el espacio en el que están ubicadas y el calor se dispersa con mayor facilidad.
Otros combustibles utilizados
Aunque la electricidad y el gas natural son muy demandados en los tipos de calefacción para casas, lo cierto es que existen sistemas que utilizan otros combustibles, como:
- · Parafina. Empleada como forma de combustión líquida para estufas portátiles con capacidad para calentar de forma rápida una estancia.
- · Leña. Muy frecuente utilizarla en estufas o chimeneas para aportar una sensación acogedora y hogareña, además de arder con facilidad.
- · Bioetanol. Para disfrutar de visualizar el fuego sin tener que instalar una chimenea o estufa con sistema de evacuación. Crean un ambiente acogedor y decorativo, sin generar cenizas u otros residuos ni requerir de instalación de tubos de evacuación de gases.
- · Biomasa, para contar con calefacciones seguras y eficientes a nivel medioambiental. La biomasa es un combustible renovable que se obtiene a partir de la quema de residuos forestales o productos de agricultura, pellets de madera, etc., por lo que se trata de un sistema muy ecológico sin ser de los más caros. El inconveniente reside en los costes de instalación que puede suponer la caldera.
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